“Éste es mi mandamiento: ámense los unos a los otros, como yo los he amado. No hay amor más grande que dar la vida por sus amigos”
(Juan 15. 9, 12-13)
Dios Nuestro
Gracias por mostrarnos tu infinito amor a través del Corazón de tu hijo. Que la contemplación de su sagrado Corazón transforme nuestra vida en una historia de amor, que comience en la humanidad y mansedumbre.
Amén